Conducir el programa Doremix ha sido una de las experiencias más enriquecedoras que me ha tocado vivir en este largo camino. Trabajar con profesionales de tan alto nivel y con gente tan experimentada, fue maravilloso. Yo nunca me he considerado una figura de televisión, por lo mismo, conducir el programa se presentó como un gran desafío para mí. Pero los integrantes del equipo, me facilitaron el camino permanentemente y por lo mismo, les estoy sinceramente agradecido. Fue maravilloso grabar bajo la dirección de Rodrigo Sepúlveda y Werner Giesen, personas profundamente dedicadas y comprometidas con su labor. Quiero destacar también el trabajo de Fernando Fuentes y Sebastián Piga, los productores musicales y subrayar la labor de todo el equipo, en general.
Siento un gran respeto por los trabajadores de la imagen. Las personas que producen Doremix logran generar piezas que llegan profundamente al corazón de las personas y eso es muy valioso. La experiencia fue inolvidable. Fueron dos años de un trabajo maravilloso, pero no exento de sacrificios: hacer cada capítulo tomaba aproximadamente siete días de grabación. Por lo mismo, este proyecto, me alejó un poco de mi oficio, como hombre de escenarios. Al concluir la aventura maravillosa, sentí necesario volver a mi pasión: hacer música, tocar. Sentí que era necesario volver a mi lugar. Esto me ha llevado a tomar la decisión de dejar el programa. Al respecto he encontrado la mejor onda y comprensión por parte del equipo. Me siento muy agradecido. Siento que fui parte importante del engranaje de Doremix y lo disfruté mucho.
Agradecer infinitamente la oportunidad y la confianza que tuvieron en mi. Aprecio los esfuerzos que todos hicieron para hacerme sentir cómodo y a gusto. Desear la mejor de las suertes en esta nueva temporada al equipo de Doremix y especialmente al afortunado nuevo conductor del programa. Sin más, me despido y les dejo un beso en el corazón.
Joe Vasconcellos
